¿Cómo se hizo Con amor, Simon (Love, Simon) de Greg Berlanti?

Todos merecen una gran historia de amor. Pero la de Simon Spier es, a sus diecisiete años, un poco más complicada: todavía no le ha dicho a su familia ni a sus amigos que es homosexual, y tampoco conoce la verdadera identidad del anónimo compañero de clase del que se ha enamorado por Internet. La resolución de ambos problemas resulta hilarante, terrorífica y capaz de cambiarle la vida a cualquiera.

El libro

CON AMOR, SIMON ha sido adaptada de la novela juvenil de Becky Albertalli Yo, Simon, homo sapiens. Publicada en enero de 2012, la obra ganó el Premio William C. Morris a la Mejor Primera Novela para Jóvenes del Año y fue incluida en la Lista de candidatos al Premio Nacional del Libro. Albertalli nunca imaginó que su libro sería publicado; menos aún que se convirtiera en un galardonado éxito de ventas y, ahora, en una importante película: “Cuando escribí el libro, yo era psicóloga”, dice. “Mi hijo tenía entonces un año; ahora tiene cuatro. Yo escribía a la hora de su siesta. Yo siempre había querido escribir un libro, y decidí hacer una prueba. No sé de dónde surgió la idea de la trama, pero los personajes habían estado rondándome por la cabeza desde hacía algún tiempo. Tenía la imagen de un muchacho homosexual de pelo revuelto, vestido con una sudadera con capucha, y ésa resultó ser la de Simon. He trabajado mucho con jóvenes que se identifican como LGBTQ o como disidentes en cuanto a sexo, y sin duda son algunas de las personas más valientes que jamás haya conocido. Como psicóloga, soy concienzudamente cuidadosa para no tomar prestadas las historias de mis clientes para mis obras de ficción; pero, en general, me inspiran mucho todos los adolescentes a los que he tenido la suficiente fortuna de conocer y trabajar con ellos”

El productor Wyck Godfrey y Marty Bowen, su socio en Temple Hill Entertainment, se han convertido en expertos en el reconocimiento de obras literarias que resultan ideales para su adaptación a la pantalla. Habiendo producido la fenomenalmente exitosa serie Crepúsculo y las adaptaciones de Bajo la misma estrella y El viaje más largo, vieron las posibilidades del relato de Albertalli para la gran pantalla. “Producimos muchas películas para el sector del público joven”, dice Godfrey. “Cada vez tratamos de hallar algo nuevo, diferente y original que dé la sensación de no haber sido realizado antes. Y, fundamentalmente, nunca habíamos visto una comedia romántica de instituto cuyo protagonista sea un adolescente homosexual. Y eso era lo que tenía el libro: lo leímos todos y dijimos: ‘¡Dios mío! ¡Nadie ha hecho esto!’ Sencillamente, nadie ha realizado abiertamente y sin reparos una película sobre un muchacho que está atravesando el proceso por el que pasa cada individuo gay: el de entender su identidad y cuándo debe salir a la luz. Ni lo ha escenificado sobre el fondo de un romance grande y misterioso según va desarrollándose en Internet con un tipo anónimo. Y el libro era desternillante. Y el personaje de Simon era de una clase tan seductora, adorable y abrazable que pensamos que era digno de desarrollarse”.

La película

En CON AMOR, SIMON, Simon Spier, un adolescente de dieciséis años que no es declaradamente homosexual, inicia un flirteo secreto por correo electrónico con otro compañero de clase igualmente clandestino. Pero cuando uno de sus mensajes cae en unas manos en que no debe, el secreto de Simon está en peligro de hacerse público. Descubre que está siendo chantajeado por Martin, su compañero de clase, socialmente torpe aunque abiertamente seguro de sí mismo: Martin cree que con la ayuda de Simon, podría conseguir una cita con la guapa Abby Suso (Alexandra Shipp). Y si Simon se niega a apoyarle… ¡Bueno! Su identidad sexual podría ser de conocimiento público. Peor aún: la intimidad de ‘Blue’, el pseudónimo del chico con el que lleva carteándose electrónicamente, también se hará pública.

Con su unidísimo grupo de amigos abriéndose en abanico en nuevas direcciones, con su correspondencia electrónica con Blue ganando importancia cada día y con la posible amenaza de Martin suspendida sobre su cabeza, Simon empieza a sentir que pierde el control. Ahora tiene que encontrar una forma de salir de su zona cómoda antes de que le expulsen, sin enajenarse a sus amigos, ni comprometerse a sí mismo ni perder la posibilidad de ser feliz con un tipo cuyo nombre ni siquiera conoce.

El productor Pouya Shahbazian fue el primero en incorporarse al proyecto. “El agente literario de Becky Albertalli me llamó cuando vendió el libro a Harper Collins. Lo leí, me encantó y participé muy desde el principio”. “Creo que siempre andamos buscando historias con las que sea posible identificarse”, añade Marty Bowen, de Temple Hill. “Incluso siendo adultos, buscamos cosas que nos recuerden nuestras experiencias del instituto y que den sensación de autenticidad y de que podamos identificarnos con ellas. Y la odisea de salir con alguien, tiene que llegar a un punto en que necesiten ser verdaderamente ellos mismos reconociendo su sexualidad, lo que hoy en día es un fenómeno francamente universal. Y la forma como se abordaba en este libro es el modo como lo enfocamos en la película, que es tratarlo como el primer beso o el desafío que supone pedir a la chica que te gusta que salga contigo. Tratemos la salida del armario esencialmente como una decisión normal, cotidiana, propia de los años de instituto, que eso es para muchos”.

Las conversaciones con Temple Hill, incluidas las mantenidas con uno de los productores de la película, Isaac Klausner, tranquilizaron a Albertalli de que su adorado libro estaba en manos del equipo indicado para llevarlo a la gran pantalla. “Mis primeras conversaciones con ellos me convencieron de que entendían a estos personajes y la historia que trataban de contar”, confirma Albertalli. “Tenían sensibilidad hacia el espíritu del relato. Alguien dejó caer el nombre de ‘John Hughes’: el humor y el corazón de sus películas, y el esfuerzo por alcanzar ese equilibrio. ¡Yo supe que querían hacer una película que hubiera sido mi favorita en mi adolescencia!” “Como alguien que creció a base de películas de John Hughes, esa era para mí la piedra de toque”, reconoce Godfrey. “Cuando le lancé la idea al estudio, dije: ‘Es algo parecido a “Dieciséis Velas” pero en vez de Molly Ringwald, hay un chico. Y Jake Ryan sigue siendo Jake Ryan’. Fue como coger esa adorada película y contextualizarla para que entendieran qué era lo que iba a hacerla diferente. Para mí, es un encuentro entre John Hughes y John Green. Es una excelente mezcla de unos personajes clásicos de instituto y con los que se puede uno identificar fácilmente, ambientada en un mundo divertido y optimista: lo que John Hughes hacía tan bien cuando yo estaba creciendo pero que también tiene eco entre el público joven de hoy en día”. “Creo que si John Hughes hubiera seguido realizando su serie de películas de instituto no habría sido más que cuestión de tiempo que hubiera roto aquellas barreras y rodado una película como ésta”, comenta Marty Bowen. “Así que de una forma extraña esta película participa tanto del legado de John Hughes como cualquier otra cosa, incluida Temple Hill”.

Los guionistas Elizabeth Berger (This Is Us) e Isaac Aptaker se alistaron para la tarea de adaptar la novela de Albertalli. Shahbazian afirma que “es una situación de ensueño que los guionistas escriban un primer borrador de guión tal y como Isaac y Elizabeth lo hicieron para “CON AMOR, SIMON”. Recibimos el guión y estaba fantástico desde el primer día. Estaban ocupados escribiendo para televisión y tuvimos que esperar a que estuvieran disponibles pero la espera mereció la pena”. Añade Albertalli: “Escribieron un primer boceto, me lo dieron y me preguntaron si tenía alguna observación. Yo lo había leído, me había hecho sollozar y había descargado cada canción que mencionaban. Y pensé: ‘¿Tengo que haceros observaciones a vosotros?’ El guión era perfecto”.

La autora quedó igualmente encantada cuando el director Greg Berlanti se añadió al grupo para ayudar a desarrollar el guión: “Greg Berlanti está a cargo de muchos programas de superhéroes en televisión. Literalmente, él es un superhéroe. Es absolutamente brillante. Antes de su incorporación yo ya era incondicional suya. Cuando oí que podía estar interesado, me quedé de piedra”. Y Shahbazian apostilla que “Greg Berlanti es la persona más considerada y más amable que he conocido. Aporta esa humanidad a la dirección de esta película. Está contando una historia muy personal para él, y mientras desarrollábamos el guión con Greg, hubo muchos momentos en que fue capaz de hacer uso de sus propias experiencias para añadir toda una capa de matices realmente nueva por debajo de lo que ya era una película muy divertida, brillante y matizada”. “Greg es una fuerza creadora increíble”, subraya Bowen. “Y una de las características definitorias de todo su trabajo es la humanidad de sus personajes. Tiene una comprensión fundamental de esa humanidad. Es lo que él es; forma parte de su ADN”. El escritor Isaac Aptaker está de acuerdo. “Trabajar con Greg Berlanti ha sido todo un sueño para mi compañera Elizabeth Berger y para mí. Posee una extraordinariamente rara mezcla de confianza y colaboración desbocada. Ésta es también una historia muy especial para él. Los productores nos pidieron que elaborásemos una lista de deseos de directores. No tengo ni idea de si llegaron a mirarla o si simplemente era algo para hacer que nos sintiéramos cómodos, pero Greg está el primero de esa lista”. “Ésta ha sido, realmente, una experiencia importante y divertida para mí”, reconoce Berlanti. “En el instituto, yo era un homosexual clandestino, por lo que, en ese nivel, funciona bien. Significa mucho para mí. Pero también he realizado a lo largo de los años muchos proyectos sobre estudiantes de secundaria y realmente quería hacer una película ambientada en un instituto que tratase de momentos y temas verdaderamente clásicos, independientemente de la sexualidad. Así que cuando éste cayó en mis manos y vi que adoptaba un punto de vista gay pero que era realmente una película sobre darse a conocer a uno mismo ante el mundo, algo con lo que cualquiera podría identificarse, me emocioné verdaderamente”.

Albertalli llegó a pasar bastante tiempo en el plató; especialmente, dado que la película se rodó íntegramente en su ciudad natal de Atlanta. Shahbazian dice que “Becky Albertalli no es sólo una persona asombrosa y una escritora fantástica, sino que ha sido una gran activo tenerla aquí, en Atlanta, durante el rodaje. Su presencia no ha sido más que positiva”. Berlanti añade: “Creo que todo el mundo está siempre dispuesto para una historia bien contada. E Isaac, Elizabeth y Becky, todos ellos, nos han brindado eso mismo. Este relato debería recordar a todos, heterosexuales, homosexuales, a todos, quiénes eran cuando asistían al instituto y antes de que se entendieran a sí mismos. Qué es enamorarse por primera vez. Qué hacemos para proteger esa experiencia, en qué consiste tener grandes amistades, tener una familia que en ocasiones se mete demasiado en tu vida”.

Nick Robinson se hace cargo del papel de Simon Spier. A la joven estrella de “Jurassic World” y “Everything, Everything”, le entusiasmó formar parte de “CON AMOR, SIMON”. “Esta historia nunca antes se había contado de esta forma”, sugiere Robinson. “Esta película tiene posibilidades de llegar a mucha gente y ayudarles de una manera como nunca antes se había hecho. Su núcleo lo forma una historia del fin de la adolescencia ambientada en un instituto. Tengo la sensación de que esto estaba pendiente y quise formar parte del equipo que ayudara a contarla”. A Shahbazian le emocionó lograr que Nick Robinson se incorporase al reparto en el papel de Simon. “Nick es un joven y brillante actor al que le espera un fantástico futuro. Tiene una presencia enorme. Capta todos los matices. Y, al igual que Simon, Nick es un tanto introvertido y desempeña el papel magníficamente. Creo que es un personaje eterno y Nick Robinson le ha hecho justicia de modo extraordinario”.

Las opiniones de Robinson sobre el relato, los temas y los personajes eran reflejo de las de la autora, los productores y el director: “”CON AMOR, SIMON” es un relato sobre el paso a la mayoría de edad centrado en dos alumnos de instituto que se enamoran”, dice. Berlanti coincide: “Para mí es una historia sobre el fin de la adolescencia y, en ese sentido, es muy tradicional. Pero en otro sentido, no ha habido una película de un gran estudio con un personaje principal gay en el centro de dicha etapa. Tiene romance y comedia y todo cuanto llena la vida de un adolescente, pero también está contada desde el punto de vista de un chico que sigue en el armario, del que está a punto de ser expulsado por las bravas por el payaso de la clase si no conecta con su mejor amigo”. “Me resulta difícil describir cuán perfectamente capta Nick Robinson tanto su personaje como la confusión que está experimentando”, dice Albertalli. “Hay unas líneas del guión que desearía reclamar como pertenecientes al libro. La madre de Simon dice: ‘Durante los últimos dos años ha sido como si hubieras estado conteniendo la respiración. Como si yo pudiera sentir que estabas conteniendo el aliento’, y eso lo veo en la forma como Nick interpreta a Simon”. “Incluso en los momentos de alegría junto a sus amigos hay una parte de él que se contiene”, prosigue Albertalli. “Le vemos forcejeando con ello de principio a fin. Es una corriente subterránea que recorre toda la película. Adoro a Simon. Ha estado en mi mente durante mucho tiempo. Su vulnerabilidad, lo violento que se siente. Su alegría. Nick simplemente lo clava”. “CON AMOR, SIMON” vive y respira el mundo de Simon. “La película está indiscutiblemente centrada en el personaje”, reconoce Robinson. “Su voz y su punto de vista. Su visión del mundo. Su sensibilidad cómica. Creo que eso es lo que la hace única en este género. No es, a primera vista, una película sobre homosexuales. Sino sobre un chico que está pasando por algo, tratando de hallar su lugar en el mundo, lo que es suficientemente difícil. Todo esto se ve complicado por el hecho de que está luchando con su sexualidad. También creo que de ahí procede buena parte de la comedia, porque él puede darles la vuelta a situaciones que podrían parecer sombrías a algunos y hallar el humor que hay en ellas. Eso es algo que encuentro muy atractivo”.

Mientras Simon mantiene un flirteo en Internet, su amistad de toda la vida con Leah, una de sus mejores amigas, interpretada por Katherine Langford (Por trece razones) se vuelve tensa. “Leah es ella misma insegura y bastante frágil”, dice Langford. “Está luchando con todos esos jóvenes que crecen a su alrededor y no quiere rendirse. Está especialmente celosa de Abby, la nueva chica del instituto que se abre paso como una apisonadora entre antiguas amistades”.

Abby está interpretada por Alexandra Shipp (X-Men: Apocalipsis) y es la chica del instituto a la que todos quieren conocer. “Creo que Alex realiza un gran trabajo siendo eso, pero también siéndolo en el momento en que Simon le descubre su secreto”, dice Robinson. Shipp afirma que “Abby en la maciza del instituto, lo que es asombroso ¡porque yo no lo fui! Ha sido, por tanto, un papel muy divertido de interpretar. El grupo central lo forman Simon, Leah, Abby y el amigo de Simon, Nick (interpretado por Jorge Lendeborg, Jr.); Simon y Abby están muy unidos aunque la relación de Abby con Leah es al principio un tanto tumultuosa. Creo que fundamentalmente porque lo que Leah siente por Simon no es completamente correspondido”.

Las relaciones entre los cuatro amigos evolucionan a lo largo de la película pero el catalizador de todos los cambios se desencadena cuando Simon ve un mensaje colgado en la página secreta de medios sociales del instituto, “Creek Secrets”. La nota trata de un alumno que es homosexual y tiene miedo de descubrirse. Tiene tanto eco en Simon que éste tiene que tenderle la mano. “Es importante para Simon”, dice Robinson, “porque representa a un igual, a un colega que está pasando por lo mismo y no sólo llevan el mismo rumbo sino que además asisten al mismo instituto. Lo que comienza como una curiosidad rápidamente se convierte en algo esencial para su vida”.

Además de a los amigos de Simon, también conocemos a su familia, incluidos sus padres Emily y Jack, interpretados por Jennifer Garner y Josh Duhamel. Garner asegura que “esta película trata de varias cosas, incluida la familia. La familia en la que nacemos y la que creamos para nosotros mismos con los amigos. Especialmente, ese precioso grupo del que formamos parte en los años de la adolescencia y que significan todo para nosotros. Creemos que lo sabemos todo de ellos y ellos opinan lo recíproco. También trata del valor de realmente plantarse por uno mismo y decir lo que necesitamos decir”.

Cuando el secreto de Simon es revelado, sorprende a su familia, que le aman y lo aceptan, pero que, con todo, experimentan una creciente agonía cuando se enteran de la noticia. “Jack y Emily tienen un buen matrimonio, una buena familia y digamos que Simon les hace ver que las cosas no son exactamente lo que ellos creían que eran”, dice Duhamel. “Emily es psicóloga y trata de analizarlo todo. Jack es un contratista con una tendencia a hacer bromas de todo. Tenemos una excelente dinámica. Dos hijos perfectos. Se profesan un gran amor mutuo, por lo que, al cabo de todo, pueden recorrer juntos este nuevo camino”. Añade Albertalli: “Simon tiene una familia realmente buena, incluida su hermana Nora, encarnada por Talitha Bateman. Se quieren y quieren a sus padres y saben que, a fin de cuentas, pueden contar el uno con el otro”.

El reparto se redondea con Jorge Lendeborg Jr. como Nick, el amigo de Simon; Logan Miller como Martin, el payaso de la clase, y Miles Heizer y Keiynan Lonsdale en los papeles de Cal Price y Bram Greenfield, dos de los compañeros de clase de Simon. Greg Berlanti apostilla: “Me siento extraordinariamente orgulloso del reparto que hemos reunido. Creo que los miembros más jóvenes del mismo son los mejores de su generación y que los veremos mucho en los próximos diez o veinte años. Si nos acordamos, en muchas de las películas clásicas de fin de adolescencia y de segunda enseñanza, había actores a los que conocimos cuando eran más jóvenes y que fueron famosos durante generaciones. Y creo que este retrato tiene esa misma capacidad”.

Encontrando la propia verdad

“La película gira en torno a la familia y el amor. Pero también en torno a los secretos”, dice Jennifer Garner. “Trata sobre cómo sacarlos a la luz, sobre quién es cada uno y sobre tener el coraje de defenderse a uno mismo y decir lo que necesita decir. Y la película se ocupa de estos temas y con el de ser uno mismo, pero de forma divertida y reconfortante. La película tiene, categóricamente, algo de diversión y no todo es drama”.

Uno de los temas principales de “CON AMOR, SIMON” es vivir la propia verdad, aprender a ser uno mismo y aceptarse como tal. Así lo explica Greg Berlanti: “Nunca es demasiado pronto para ser quien uno es. Hay muchos chicos que no logran salir a la luz en el instituto y Simon es expulsado y arrastrado, pero aprende a aceptar quién es y a vivir con su propia verdad y a ser él mismo”.

La película anima al público a tener valor y a ser auténticos para con ellos mismos. “Espero que la gente que vea la película y la que lea el libro se sientan facultados para reconocer su verdadera personalidad”, dice Becky Albertalli. Nick Robinson está de acuerdo. “Creo que todo el mundo ha pasado por esto en algún momento de su vida. Tratar de descubrirse a sí mismo y de ser la persona que uno está destinado a ser es un tema universal. Creo que todos pueden identificarse con ello”. Y Alexandra Shipp añade: “Creo que muchos adolescentes pueden identificarse con la lucha porque me parece que muchos de ellos están pasando apuros para hallarse a sí mismos. No saben quiénes son. No tienen una idea de quién quieren ser cuando sean mayores. Y no se trata sólo de la sexualidad. Sino de quién es uno realmente. No con quién te acuestas sino quién eres realmente en este planeta”.

La música

Como en muchas de las películas que inspiraron “CON AMOR, SIMON”, la música es parte integral de la película y las canciones de la banda sonora siempre iban a ser un aspecto importante de la producción. A tal fin, los realizadores nombraron productor ejecutivo de la banda sonora a Jack Antonoff, cantante, compositor, músico y productor tres veces ganador del Premio Grammy®.

Antonoff es probablemente más conocido por su trabajo como primer cantante y compositor del grupo Bleachers, y como primer guitarrista del conjunto de rock Indie, Fun. “Cuando me reuní con Greg Berlanti”, recuerda, “comenzó a enseñarme clips y creo que, a modo de tentativa, habían introducido algo de mi música, lo que podría haber sido el origen de que se me pidiera que participase. Empezamos discutiendo lo que la película le sugería y él habló de una especie de sensación moderna tipo John Hughes, lo que para mí significaba mucho. Luego vi la película y era preciosa. Me encantó totalmente. La entendí por completo, así como la forma como era a la vez para pasar un buen rato y extraordinariamente emotiva”.

Aunque unas pocas de las canciones de Antonoff has aparecido anteriormente en películas, el compositor nunca había creado música específicamente para la pantalla. “Era algo nuevo para mí y la única razón por la que me sentí bien haciéndolo es porque aprecié que realmente lo había captado. Verdaderamente me llegaba. La primera vez que vi la película, la canción de los Bleachers “Wild Heart”, se interpretaba al final y tan pronto como lo vi, pensé que podía tomarla como punto de partida. Me dije: ‘Bien. Eso funciona’. Y yo no la había compuesto para la película. Pero encaja perfectamente, así que sé qué partes de ella podía tomar y crear una nueva obra”.

La banda sonora definitiva contiene 13 canciones, incluidas clásicas de The Jackson 5 y Whitney Houston, así como varias de Bleachers y nuevo material de Antonoff, incluido el sencillo “Alfie’s Song (Not So Typical Love Song)” interpretada por dicho conjunto. “Para mí, esa canción es el sentimiento de “CON AMOR, SIMON”: a la vez extremadamente optimista y extremadamente emotivo”, dice Antonoff. “Es una canción que uno puede poner en el coche con sus amigos o en una fiesta, pero luego la letra se cuela en esos momentos que son muy emotivos. Y eso es lo que la película hizo por mí”.

Ambientación

“CON AMOR, SIMON” se rodó en la zona metropolitana de Atlanta. Albertalli, natural de Georgia y de Atlanta, ambientó su novela en su ciudad natal. Y allí precisamente es donde los realizadores quisieron rodarla. Tal y como explica el productor ejecutivo Timothy M. Bourne, “Simon era un libro escrito por un habitante de la zona, y, por una vez, ¡una película que estoy rodando en Atlanta está realmente ambientada en Atlanta! Greg quería asegurarse de que fuéramos fieles al relato y a la situación económica de cada personaje. Rodamos en un instituto muy grande situado en un entorno urbano. En realidad rodamos en tres institutos diferentes. La acción se desarrolla en el Sur, por lo que tenía que haber una escena en un restaurante Waffle House. Allí forma parte de la vida y del paisaje”. “Temple Hill realizó cuatro películas en Atlanta el año pasado”, añade Marty Bowen. “Y es un lugar maravilloso para rodar. Tiene grandes instalaciones. La oficina del alcalde apoya el cine. Todos lo acogen con los brazos abiertos mientras que en otras ciudades, aunque produce ingresos, hay mucha gente a la que no le gusta la llegada de los ‘intrusos’. Pero en ese sentido, Atlanta ha sido todo un placer. Que la película se desarrolle ahí es casi secundario. Pero fue un excelente maridaje de la oportunidad y la necesidad creativa”.

Durante el rodaje en Atlanta, los realizadores quisieron utilizar tantos establecimientos locales y únicos como pudieran. Dancing Goats Coffee es una empresa local que está empezando a expandirse. “También tratamos de dar a conocer a algunos artistas locales”, dice Bourne. “Hay un grafitero en Atlanta que tiene carteles y pegatinas de ‘Rezad por Atlanta’ en toda la ciudad, así que los incluimos, pero Dancing Goats formaba parte del picante, del sabor de Atlanta que queríamos incorporar a la película”.

Para la escena culminante de la película –la de la feria–, los realizadores recrearon una en el parque Lillian Webb de Norcross. “Elegimos el parque de Norcross por varias razones”, explica Bourne. “Tenía una hermosa plaza que lo rodeaba y, en ella, una fuente, y podía acoger a las atracciones de la feria”.

Vestuario

El director Greg Berlanti eligió a Eric Daman para diseñar el vestuario de “CON AMOR, SIMON”. “Es un placer trabajar con Greg”, dice Daman. “Entre cine y televisión he trabajado con centenares de directores y me da la sensación de que es uno de mis favoritos. Es muy generoso y honrado. Dirige con una sonrisa”. El diseño de vestuario es un componente integral de la narración. “El diseño de vestuario puede ser aparatoso o puede ser muy sutil y matizado como lo que estamos haciendo con el personaje de Simon”, dice Daman. Al comienzo es más desenfadado, lleva colores y tonos más claros. Cuando empieza a enamorarse, los colores se aclaran todavía más. Pero cuando Martin empieza a hacerle chantaje, los colores se vuelven más oscuros, de mal agüero, casi melancólicos. “Al personaje de Leah, lo vestimos con cuello alto durante toda la película. Cuando llegamos al punto crítico, la vemos con un jersey de cuello alto negro. Un aspecto más lúgubre y polémico”.

En la novela, a Simon le encantan las sudaderas con capucha. Daman quería ser fiel al personaje pero también darle un poco más. “Simon se cambia de ropa casi 50 veces. Yo no podía crear este personaje con una sudadera con capucha y cremallera. En nuestra primera reunión, Greg se mostró totalmente de acuerdo. Queríamos señalar y jugar un tanto con la sudadera de capucha y con lo que significa y con las escenas en que aparecería”, explica Daman.

Abby es nueva en Atlanta y necesitaba un poco más de estilo. “Abby tiene un estilo muy distintivo. Más urbano. Transmite una sensación neoyorquina. Un poco más atlética, un poco más de marca y un poco más de talla superior”, dice Daman. Daman dio rienda suelta a su inspiración creadora cuando diseñó para Martin. “Yo no tengo favoritos, pero fue muy divertido diseñar para Martin. Me di un paseo por el programa SNL de 1975. Acabamos vistiéndole con camisas de los años 70 sobre camisetas punk y lo cubrimos con rebecas. El mundo de Martin está sumido en el caos”.

Últimas palabras

“Al fin y al cabo”, observa Kathryn Langford, “éste es un gran estudio que realiza una película pro LGBTQ y eso es de lo más. ¿Comprenden?” Apunta el director Greg Berlanti: “No era una historia que yo tuviera la sensación de que ya existiese. Refleja mi propia experiencia en el instituto pero, con todo, da la sensación de ser para todos. ¿Comprenden? El punto de vista central era algo que me resultaba más familiar, pero lo que la película tenía que decir era algo con lo que todos podrían identificarse”.

 

Love, Simon

Love, Simon
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Nick Robinson (Simon) and Katherine Langford (Leah) star in Twentieth Century Fox’s LOVE, SIMON. Photo Credit: Ben Rothstein.