Luca Guadagnino presenta en la CinemaCon de Las Vegas un avance de su peculiar remake del filme de culto de Dario Argento
Astrid Meseguer – LA VANGUARDIA (2 de mayo de 2018)
Barcelona – Cuarenta años después del estreno de Suspiria, película de culto de Dario Argento protagonizada por Jessica Harper, Stefania Casini y un jovencísimo Miguel Bosé, Luca Guadagnino ha decidido realizar un remake de este clásico giallo caracterizado por un estilo visual cercano al expresionismo que ha influenciado a cineastas de la talla de John Carpenter o Brian de Palma.
Después de filmar el aclamado drama Call me by your name, que logró el Oscar al mejor guion adaptado para James Ivory, Guadagnino ha contado con su musa Tilda Swinton y con Dakota Johnson para volver a explicar a su manera la espeluznante historia de una joven bailarina que viaja a una prestigiosa academia de danza y de pronto empiezan a suceder situaciones extrañas en el lugar.
Las primeras imágenes de la película, que se estrena oficialmente en otoño, fueron presentadas al público congregado en la CinemaCon de Las Vegas, en un panel organizado por Amazon Studios. El metraje no dejó indiferente a nadie. De hecho, los asistentes tuvieron que compartir este primer avance mientras degustaban un almuerzo y, al parecer, lo que vieron no era apto para personas sensibles. Muchos se quedaron estupefactos y valoraron el material como “extremo, enfermizo y grosero”. Está claro que el realizador de Cegados por el sol no ha escatimado en imágenes escabrosas que remueven el estómago para impactar a la audiencia.
La escena en cuestión mostraba a Dakota Johson, que interpreta a Susie Bannion, practicando ballet en una aterradora compañía de danza. A cada pirueta que da la joven se ven de manera intercalada tomas que enseñan a una compañera asesinada y destripada hasta los huesos. Un “conjunto de huesos rotos, orina, saliva y sangre”, tal y como ha descrito Variety.
El rodaje de Suspiria ha sido tan intenso que la propia Dakota Johnson, que ya declaró haberlo pasado mal en la saga erótica Cincuenta sombras de Grey, aseguró en una entrevista a Elle que “he tenido que acudir a terapia después de hacer la película”.
Además, dio algunos detalles de cómo fue la producción: “Estábamos en un hotel abandonado en mitad de la montaña, que tenía como unos 30 postes de teléfono en la terraza, por lo que la electricidad palpitaba en el edificio, y todos estábamos aterrorizados.” Eso sí, la actriz solo tiene palabras de elogio hacia el director, con el que dice haber aprendido muchísimo.
En el reparto completamente femenino de la película también figuran Chloë Grace Moretz, Mia Goth y Jessica Harper. Por su parte, Thom Yorke, vocalista de Radiohead, se encargará de la banda sonora.