Mi butaca por Carlos Infante: “El hastío que me produce la sobredosis Star Wars”

En primer lugar quiero expresar mis disculpas por no acudir a mi cita diaria con todos ustedes, mas deben comprender que hay ocasiones que no es posible y en ésta me encontraba fuera y sin acceso a internet. Fuere como fuese, nuestro compañero Rafa García me sustituye a la perfección, siempre incisivo, siempre colocando su dedo en la llaga, siempre apuntado a la farsa que abunda en el mundo del cine. Aclarado este punto hoy toca Star Wars.

No voy a hablarles de mi ‘amigo el pesetero’ que cada dos años decide (o decidía antes de vender Lucasfilm a la Disney) revisar las películas y añadir, o modificar, unos segundos para poner a la venta una nueva edición que la legión de fans comprarían por enésima vez las nuevas ediciones a precio de lujo. Tampoco voy a contarles que jamás existió, en un principio, la idea ni el proyecto de las trilogías, o que la primera vez que apareció en un cine lo de ‘Episodio…’ fue en 1983 con El retorno del jedi donde si ponía al principio de los créditos lo de ‘Episodio 6’. Tampoco voy a ser tan ‘malo’ como para recordar con detalle como cuando anunció que se tomaba un año sabático la siguiente noticia que tuvimos del Lucas fue que su entonces mujer había pedido el divorcio. Todo esto y mucho más lo dejo para un futuro más o menos cercano.

Hoy quiero centrarme en al hartazgo que me produce, y produce a todos loe que no somos fans de esta serie, la saturación de rumores y noticias sobre la saga. Soy consciente de que en poco más de tres meses se estrena el Episodio VIII, pero no se necesita este aplastamiento diario con el tema que más parece intoxicación que información. Despidos continuos, proyectos de spin-off sobre personajes, ocurrencias o despropósitos como que Spielberg sería el director del episodio IX, lo cual ha quedado desmentido hoy con el anuncio de que será J.J. Abrams quien dirigirá la que de momento se presenta como última entrega de la saga.

No tengo por costumbre comentar aquello que no existe, o que no se ha estrenado y, mucho menos, lo que no existe. Mi postura como comentarista de cine es simple. Espero a ver la película, a que se estrene y cuando está en cartel la comento y expreso mi opinión. Todo lo demás me resulta absolutamente irrelevante cuando no infinitamente cansino. Si el director pudo ser uno, pero fue otro y al final cambió el guion, si un actor iba a protagonizar la película pero se rompió un dedo y hubo que sustituirlo. Si… Nada de eso me importa, como norma. Lo único que me interesa es ver el resultado final y valorar lo que se ha hecho, no lo que no se ha hecho o se pudo hacer. Si entrase en ese juego al final acabaría pensando que si mi abuela (que en paz descanse) tuviese ruedas habría sido una bicicleta.

Comprendo que la competencia es dura y el departamento de publicidad y marketing tiene que producir a tope, llenar ríos de tinta en periódicos y revistas, miles de líneas en webs y horas de radio y televisión, pero no es necesario este despliegue. Conozco a la responsable de Star Wars en España y es una excelente profesional. Además la película tiene el éxito de taquilla garantizada. Todos iremos a verla y todos la comentaremos y comparemos con sus precedentes. Créanme que no es necesario este derroche de medios diario que en el peor de los casos puede provocar una saturación no deseada. Hubo errores en el pasado, como estrenar el episodio I en España en Agosto cuando se había estrenado en Estados Unidos en Mayo, con lo cual circulaban hasta copias vhs piratas (el DVD todavía estaba en sus inicios), pero esos fallos de estrategia se han subsanado mucho tiempo atrás.

Sólo necesitamos algunos datos de la película en cuestión, las consabidas fotos y posters y que no se repita lo de que ni haya un Pressbook de la película como sucedió en el Episodio VII, ni tampoco hubo imágenes para la televisión. Eso sí que es necesario y no el torrente de rumores y especulaciones diario que ni considero a estas alturas.

A los espectadores que lean esta columna les pediría que se olviden de todo lo que se publica al respecto, que esperen tranquilamente y que cuando se estrene la película vayan a verla porque es uno de esos títulos que hay que ver pues de lo contrario es como si vivieran en otro planeta. A los responsables de Disney no les tengo nada que pedir porque saben cómo hacer su trabajo a la perfección, bastante tienen con soportar las exigencias y demandas de Lucasfilm. A los compañeros de otros medios les pido que no saturen con el mismo tema, que no hace falta ser siempre el primero en dar la última noticia. Las noticias para ser tales deben ser contrastadas y verificadas y, a la larga, no cuenta ser el primero, aunque si se logra es un mérito y queda muy bien, lo importante es el rigor, la veracidad y el trabajo bien hecho.

Si a mi, que soy profesional del cine y de los medios de comunicación, me cansa en estos momentos todo lo que lleve la marca de Star Wars, no quiero pensar lo que padecerán los espectadores que no sean seguidores acérrimos de la saga, los que no desearían estar leyendo y hablando del universo de Star Wars las 24 horas del día. Hay más películas, hay más sagas, hay más cinematografías. Hay lugar y espacio para todo. No sólo existe Star Wars. El cine no nació en 1977 con la guerra de las galaxias, ni se limita a Star Wars, afortunadamente. Este viernes se estrenan 10 películas en España, algunas no llegarán a la mayoría de las ciudades desgraciadamente. Ya he visto algunas y me he divertido, me ha interesado lo que me cuentan y me han hecho reflexionar. Pluralidad ante todo y elección siempre. Ahí está la clave.

Carlos Infante